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El estrés y su manejo durante la pandemia

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Tiempo de lectura: minutos

Hace más de 30 años todos los pronósticos apuntaban a que los problemas de salud más importantes en el siglo XXI serían el estrés y la obesidad, el día de hoy ambos interactúan convirtiéndose en serias amenazas para nuestra salud pero en estos momentos en el que hace su aparición la pandemia de COVID 19 el estrés se ha transformado en un tema central que debe ser comprendido y manejado adecuadamente para evitar trastornos que pueden alterar nuestra salud física y mental incidiendo incluso en las esferas familiar, social y laboral.

“Ni tu peor enemigo puede hacerte tanto daño como tus pensamientos”.
Buda.

¿Qué es el estrés?

Te acompañó el día en que hiciste tu examen profesional, el día que entregaste el reporte de ventas y cuando no te pagaron el préstamo…

Es  nuestro compañero en las más grandes hazañas, lo necesitamos y nos acompaña como una reacción física mental y emocional ante cualquier situación de peligro o evento estimulante, algunos lo confunden con una enfermedad,  pero de eso nada tiene, en realidad, el estrés es una respuesta natural, sana y nos ha servido para sobrevivir a lo largo de la historia del hombre, nos acompaña desde nuestros orígenes y nos ha ayudo a salir airosos de los ataques de nuestros depredadores, en resumen es la manera en que responde  nuestro sistema nervioso simpático ante alguna amenaza, es una respuesta denominada de lucha o huida. Sin embargo, el cuerpo no puede mantenerse en estas condiciones de alarma de manera permanente, por lo que la contraparte del sistema nervioso simpático denominada parasimpático hace un esfuerzo enorme para regresar al cuerpo a su estado natural lo que es denominado homeostasis y que en palabras sencillas equivale a que el pulso, la respiración, la presión arterial y todas las constantes y químicos de nuestro organismo que se habían alterado regresen a la normalidad.

¡El estrés es una respuesta individual, depende solo de ti!

Ahora bien, lo más interesante es comprender que todo esto ocurre gracias a la recolección de todos los estímulos que percibimos mediante nuestros sentidos, de cómo los percibimos e interpretamos en nuestro cerebro y como este hace que nuestro cuerpo responda física y emocionalmente a esos estímulos, eso es lo que representa la respuesta individual al estrés. De cómo respondemos o no, de cuanto reaccionamos o no, de cuanto nos permitimos afectar o no de esos estímulos externos, de esa información que recibimos depende por completo los efectos positivos o negativos que estrés genere en ti.

Existen dos tipos de estrés, el agudo que es el estado inicial producto de un estresor que nos pone en alerta, por ejemplo  “un susto” como el que se te aparezca un ratón,  y el segundo es el crónico,  que es por una sobre carga del organismo a la exposición prolongada cuando enfrentas una enfermedad crónica como un cáncer,  otro ejemplo puede ser una persona que repentinamente es recluida en una institución penitenciaria o nosotros mismos en este momento que nos hemos visto forzados a permanecer en nuestros hogares a consecuencia de la pandemia  por el COVID 19. 
Hay otros estresores a los que nos vemos comúnmente expuestos:

  • Sustancias como la cafeína, la nicotina y las anfetaminas.
  • Situaciones que resultan estresantes como la falta de sueño y lugares con climas extremos.
  • Las exigencias laborales, los largos trayectos en transporte público, el caminar por calles despobladas, los entornos familiares conflictivos, los problemas económicos, la inseguridad, la violencia familiar, el tráfico excesivo, las pérdidas familiares y en este momento especial el COVID19.

¿Qué ocurre en nuestras mentes al pensar en la amenaza por la infección por COVID-19?

Pensamientos negativos y conductas inadecuadas

Tenemos miedo a enfermar, miedo a morir, a no poder salir, a perder el trabajo.Existen estudios que hablan sobre las emociones que perciben las personas ante estas situaciones y es importante identificar las fuentes de estas sensaciones. Lo primero es darnos cuenta de que mucho de lo que pensamos y sentimos nos ocurre porque tenemos una sobre saturación de información, esto ocurre en gran medida por toda la información que recibimos a lo largo del día, al permanecer “conectados” por todos los medios posibles recibiendo información.

No es sana la sobre saturación de información

Durante el aislamiento es importante tomar en cuenta que es posible que las personas que sufren de alguna enfermedad mental como ansiedad o depresión puedan tener una exacerbación, incluso si no tenían diagnostico podrían tener sus primeras manifestaciones de tal forma que  es importante estar atento a cualquier manifestación o síntoma.

Síntomas de alarma durante el aislamiento:

  • Irritabilidad.
  • Llanto fácil.
  • Berrinches.
  • Aislamiento.
  • Dolores de estómago o de cabeza inexplicables.
  • Que no disfruten actividades que habitualmente hacían.
  • Alteraciones del patrón del sueño.
  • Cambios notables en el patrón de alimentación

¿Cómo reducir la ansiedad y estrés por COVID 19?

Desde el inicio de la pandemia en diciembre en Wuhan, China se han hecho innumerables aseveraciones sobre tratamientos medidas, medicamentos tales como que se debían suspender algunos anti hipertensivos, la aspirina y el ibuprofeno, para estos momentos la información es completamente diferente pero hubo personas que sufrieron consecuencias por seguir esos consejos, lo que deseo sugerir es entonces, que sigamos las propuestas que están alineadas con un buen manejo del estrés y se centran en medidas muy sencillas  que cito a continuación:

  • Enfoquémonos en tener “Pensamiento basado en evidencia”.
  • Auto diálogo positivo. 
  • Informarse únicamente de fuentes confiables.
  • Reducir la exposición a noticias COVID 19 (24x7).
  • Apego irrestricto a directrices dictadas por autoridades.
  • Salir de casa solo para lo indispensable.
  • Es sano estimular el diálogo dentro de casa 
  • Mantener una dieta sana y con horarios fijos.
  • Generar un tiempo para el ejercicio físico.
  • Distraerse con un buen libro o una buena película.

 

Fuentes citadas; Harvard 2020

Dr. Alfonso Juan Lara Eseiza
Medico Cirujano 
C.P.861366.